NUEVA ORK (AP) — Para variar, David Ortiz no fue abucheado en el Bronx. En su último juego en el Yankee Stadium, la casa de sus más acérrimos adversarios, el astro dominicano de los Medias Rojas recibió una ovación de pie que se prolongó durante 30 segundos.
El estadio fue invadido la noche del jueves por un numeroso grupo de fanáticos de Boston, que corearon “íPa-pi! Pa-pi!”. “Soy de los que piensan que cuando te acostumbras a algo y te va bien así, no vas cambiar nada”, reflexionó Ortiz