Las imprudencias cometidas a diario en las vías del país por los motoristas como cruzarse en rojo, subirse a las aceras por donde caminan los peatones, rebasar por la derecha y desplazarse a alta velocidad, no pasan desapercibidas, y los accidentes tampoco.
A pesar de las evidentes violaciones a las leyes de movilidad y tránsito, las autoridades, por lo regular, ignoran estas fallas, lo que evidencia la falta de controles para estos conductores.
En momentos específicos como Semana Santa y las festividades de Navidad y Año Nuevo, es cuando se intensifica la fiscalización de los motores en las calles, con inspección de seguro, uso de casco protector y otros.
Si se observan titulares de noticias sobre accidentes de tránsito, siempre resalta el liderazgo de los motores, tanto en la cantidad de personas que fallece como en la de casos en los que se ven involucrados al momento de choques, donde incluso abundan aquellos que ocurren entre los mismos motoristas.
Peligro constante
De acuerdo con el ortopeda Marcelo Puello, salir a las calles o vías del territorio dominicano se ha convertido en un peligro latente con los constantes accidentes, la violencia y los problemas de salud mental.
“Salimos a matarnos o a que nos maten todos los días por la alta violencia que hay, la inseguridad mental, por el problema que se ha hecho un caos y que el Estado dominicano no ha encontrado la forma de resolverlo con el tema del tránsito en las grandes ciudades”, lamentó.
A eso se le suma, según el especialista, la inobservancia, la falta de progreso, de planificación y resolución de lo que tiene que ver con el tránsito, esto tras considerar que el problema se le está yendo de las manos a las autoridades.
Explicó que los motociclistas andan sin control cruzando los semáforos, pero tampoco respetan a los agentes de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) y los motores lo compran sin complicaciones.
Desde el punto de vista de salud, el especialista indicó que el Estado gasta millones en recursos para atender a los accidentados, sobre todo, motoristas, porque no hay una penalidad al momento de conducir un motor y se compra con facilidad.
Recordó la importancia que tendría aplicar un seguro de accidentes de tránsito de los motores, para no malgastar los recursos económicos.
Las cifras lo reflejan
Con el desplazamiento de aproximadamente siete millones 700 mil individuos por las diferentes autopistas y carreteras del país, la problemática, que se ha convertido en el pan de cada día, se mantuvo en aumento durante el asueto de Fin de Año, con un total de 158 siniestros viales, que afectaron a unas 185 personas cuando se desplazaron aproximadamente.
El director del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), Juan Manuel Méndez, detalló que de esa cantidad 123 involucraron motocicletas, lo que representa un 78 % de los casos, seguido de 11 vehículos livianos, 10 atropellamientos, nueve yipetas, dos camionetas, un autobús, una furgoneta y un buggy.
Estos siniestros ocurridos en la segunda fase del operativo “Conciencia por la Vida 2024-2025, desde el 30 de diciembre a las 2:00 de la tarde hasta el día primero a las 6:00 de la tarde, dejaron 30 personas fallecidas.
De este total de fallecidos, nueve ocurrieron dentro del dispositivo de seguridad vial y 21 fuera este; además, 23 fueron por motocicletas, cinco por vehículos livianos y dos por atropellamiento.
Se suman los datos de las fases de Navidad y Año Nuevo, el acumulado sería de 262 accidentes, 316 lesionados y 42 muertos. Esta última cifra, reveló Méndez, muestra un incremento de cuatro decesos en comparación con el año pasado.
“Estamos hablando que hubo incremento respecto al año pasado de unas 500 mil personas en movilidad… y a mayor movilidad mayor probabilidad de accidentes.
Y desafortunadamente siguen siendo las motocicletas el gran dolor de cabeza de las autoridades y del país en la cantidad de fatalidades”, dijo.
El director de la Digesett, Francisco Osoria, destacó que el parque vehicular y especialmente de motocicletas ha aumentado, por lo que no cuentan con una fiscalización a través de la tecnología, por lo que sólo controlan donde tienen presencia.
Las provincias que más casos registrado fueron Santo Domingo (13 %), San Pedro de Macorís (8 %), San Cristóbal (7 %), La Altagracia y Puerto Plata (6 %) y el Distrito Nacional (5 %).
Méndez informó que se atendieron 560 personas intoxicadas por alcohol, de los que 73 resultaron ser menores con edades comprendidas entre los 12 y 17 años. También se atendieron 93 personas por intoxicación alimentaria.
Durante este último operativo se realizaron 30,042 asistencias al público, de las que 25,082 fueron asistencias viales.
La Defensa Civil realizó 286 atenciones en salud, consistentes en emergencias domésticas, tomas de presión, cefaleas y cura, etc.
Llamado
— Reflexionar
Méndez llamó a la población a reflexionar sobre las acciones que realizan, poniendo énfasis en las intoxicaciones por alcohol en la que se ven afectados niños, que deberían estar al cuidado de sus padres.
En asueto hubo 1,390 motocicletas detenidas
Retención. La Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) informó que durante el operativo por fin de año fueron retenidos 266 vehículos pesados por transitar sin permiso, 1,390 motocicletas y 42 vehículos livianos por transitar con personas sobre la parte de carga.
Asimismo, realizó 25,459 fiscalizaciones por distintas faltas a la ley 63-17, dentro de las que se destacan 7,056 motociclistas por transitar sin casco protector, 1,472 por violar la luz roja, 1,165 por transitar sin cinturón, 1,021 por exceso de velocidad, 517 por uso del celular.
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