Joseph Woznik, un hombre aparentemente perturbado, no pudo escoger mejores días que los de la Cuaresma y la Semana Santa, para incursionar en cuatro iglesias de Queens, donde cometió igual cantidad de robos.
“Robé en esas iglesias, porque estaba enojado con Dios”, les dijo el sospechoso a los investigadores que lo arrestaron ayer miércoles, bajo cargos por delitos de crímenes de odio, robos, hurto y allanamiento de moradas