Cuándo reabrir el país y suspender la cuarentena será “la decisión más importante que haya tenido que tomar”, dijo el mandatario Donald Trump ayer, advirtiendo que no lo haría hasta que sea absolutamente seguro, a pesar de las esperanzadoras señales de que la propagación de la pandemia podría estar disminuyendo.
“Voy a tener que tomar una decisión, y sólo espero por Dios sea la decisión
correcta”, dijo Trump. “Sin duda, es la decisión más grande que haya tenido que tomar”.
Después de esperar previamente que los estadounidenses volvieran a trabajar este lunes, tras el domingo de Pascua, Trump admitió el viernes que sería mejor seguir los consejos de sus expertos en salud.
“No haremos nada hasta que sepamos que este país va a ser saludable. No queremos regresar y que se repita todo”, dijo Trump.
Añadió que anunciaría el lanzamiento de un grupo de trabajo que llamó “Apertura de nuestro país” el próximo martes, para trabajar hacia ese objetivo.
“Quiero abrirlo lo antes posible”, afirmó. Y agregó: “Los hechos determinarán lo que hago”.
EEUU lidera los contagios a nivel mundial (503,177 mil), y se ubica segundo en cuanto a muertes (18,761), sólo superado por Italia (18,849), a quien podría desplazar muy pronto.
Casi el 40% de los casos nacionales se han dado en Nueva York, el epicentro del brote del país.
Aun así, Trump señaló un “tremendo progreso” que podría traducirse en menos muertes de las que su gobierno predijo anteriormente, informó New York Post.
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