La propuesta de reforma fiscal, impulsada por el gobierno de Luis Abinader, afectará a los sectores populares del país, ya que productos básicos como el guineo, salami, aguacate, aceite, entre otros, estarán sujetos a nuevos impuestos.
Así lo consideró el economista Apolinar Veloz, quien precisó que la reforma tiene una falencia: no hay una medición del aumento de los ingresos ni el gasto que se pretende cubrir con esos los impuestos.
«La gente va a pagar más impuesto al valor agregado y una mayor cantidad de impuestos selectivos al consumo. Es decir, la reforma fiscal descansa en el consumidor«, sostuvo Veloz al ser consultado sobre el tema por periodistas del periódico Hoy. Por su parte, el economista Haivanjoe Ng Cortiñas, advirtió que el impacto de la reforma fiscal sobre la gente será brutal y se manifestará de diversas maneras. «Si se trata del ITBIS, hasta el momento 50 bienes y servicios están exentos de ese impuesto; con la reforma, a 29 se les aplicará el 18%, encareciendo de manera directa los bienes que compran y aumentando la inflación«, dijo.
Continuó: «La reforma tiene algo aún más peligroso: el gobierno pretende auditar y fiscalizar el consumo de la gente, lo que viola la privacidad de la población, y la DGII se extralimitaría en sus funciones». En tanto, Nicolle Valerio Issa, directora ejecutiva de Asociación de Industrias de Bebidas No Alcohólicas (ASIBENAS), declaró que el proyecto significaría un duro golpe para muchas familias dominicanas, quienes enfrentarían un aumento considerable en el costo de las bebidas que consumen diariamente.
Explica que actualmente, los consumidores ya están sujetos al pago del ITBIS, y la introducción de un impuesto selectivo podría generar incrementos de entre el 25% y el 50% en algunos productos. Este impacto afectaría especialmente a las familias de los primeros quintiles de la población, que son las más vulnerables ante el aumento de precios. «Las bebidas no alcohólicas son parte fundamental de la canasta básica: refrescos, jugos, aguas y maltas representan una opción accesible, e inocua para los hogares de menores ingresos», detalló Valerio Issa mediante un comunicado de prensa.
Mientras que, el Consejo de Desarrollo Económico y Social de Santo Domingo (CODESSD) manifestó: «Si bien es cierto que se hace necesario organizar y velar por un buen desempeño de las finanzas públicas, la reforma debe afectar lo menos posible a la clase media y trabajadora, incluyendo a los sectores generadores de empleo, cuya situación actual se encuentra en estado de vulnerabilidad e inestabilidad, debido a lo estático de los precios de la canasta básica y artículos de consumo masivo».
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