SAN JUAN.- Las autoridades puertorriqueñas investigan el hallazgo de vacunas contra la covid-19 en una caja de cartón abandonada en Morovis, un municipio del interior de la isla caribeña, donde los responsables sanitarios confirmaron la presencia de nuevos casos de la variante británica.
El secretario de Salud de Puerto Rico, Carlos Mellado, que mostró su indignación por el hallazgo en conferencia de prensa, ordenó este miércoles una investigación inmediata para aclarar el caso, que fue denunciado por la alcaldesa de Morovis, Carmen Maldonado.
“Ante esta lamentable situación, acabo de hablar con la doctora Cardona del Departamento de Salud para que se investigue el caso de inmediato. Gracias al ciudadano moroveño que responsablemente llamó a la Policía Municipal y radicó la querella correspondiente”, señaló la funcionaria a través de su cuenta en la red social de Twitter.
El vecino encontró en la carretera del sector La Alianza de la Calle Girasol de Morovis una caja de cartón que en su interior contenía una pequeña nevera con dos dosis de la vacuna contra la covid-19.
El secretario de Salud dijo que funcionarios de la agencia entrevistarán a la persona que encontró la caja para que se dé comienzo a una investigación.
“Me comuniqué con el secretario del Departamento de Seguridad Pública y personal de Salud está en Morovis entrevistando a la persona que encontró la caja y a otras. Estoy muy molesto y, más que todo, indignado”, resaltó Mellado.
“Tenemos que investigar, llegar a las últimas consecuencias, porque hay un interés apremiante del pueblo puertorriqueño para saber qué pasó”, subrayó el funcionario.
El vecino encontró una caja de cartón que en su interior contenía una nevera color blanca con jeringuillas y una cajita con dos dosis de vacunas de la Compañía Moderna.
Por otro lado, Mellado confirmó que se detectaron dos casos adicionales de personas contagiadas con la variante británica del coronavirus, la SARS-CoV-2, aunque como dijo de momento no hay indicios de brotes en los municipios donde viven ambos pacientes.
Dijo que se recibió confirmación oficial después de que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) analizaron muestras tomadas.
Los hallazgos iniciales fueron hechos por el Ponce Health Sciences University (PHSU) y el Dengue Branch de los CDC, cuya sede se encuentra en la isla.
Los dos casos de la variante británica siguen al primero reportado por Salud el pasado 16 de febrero, que se corresponde con una puertorriqueña residente en Europa.
Mellado, pese a la confirmación de dos casos adicionales, matizó que no cuentan con evidencia de un brote de la variante británica en Puerto Rico.
El funcionario sostuvo que Puerto Rico atraviesa por un patrón de disminución de casos positivos y muertes por la covid-19.
Mellado insistió en que no ha ocurrido un aumento significativo de casos en los municipios donde ocurrieron estos casos.
Sobre la incidencia geográfica de la covid-19, el Departamento de Salud informó hoy que 21 municipios de la isla se encuentran en nivel de transmisión alto, por lo cual escuelas ubicadas en estos pueblos no podrán recibir estudiantes la semana que viene, según se ha establecido en los protocolos de la agencia.
“Es importante que entiendan que para la escuela que quiera tener la modalidad híbrida, de clases presenciales, uno de los criterios importantes es que su municipio no esté en el nivel rojo. También tiene que cumplir con seguridad, protección personal para estudiantes y maestros, tienen que cumplir con las distancias y lo que los protocolos establecen”, indicó Mellado.
Respecto al proceso de vacunación en la isla, la compañía Costco dio a conocer que comenzará a administrar vacunas contra la covid-19 en el territorio estadounidense, incluidas las tiendas de Puerto Rico.
La empresa no especificó la fecha para el comienzo de la vacunación, aunque expuso que piden a sus clientes no comenzar a llamar a los establecimientos hasta se anuncie el inicio del proceso.
En estos establecimientos también se vacunarán prioritariamente personas de alto riesgo, incluidos los trabajadores de la salud, adultos de 65 años o más y otros trabajadores de primera línea.
La megatienda está incluida en el Programa Federal de Vacunación elaborado por los CDC.
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