En un encuentro con lleno de sorpresas y no apto para cardíacos, los Golden State Warriors colocaron entre la espada y la pared a los Boston Celtics tras derrotarlos 104-94 en el quinto partido de las Finales de la NBA.
Con esta victoria, Golden State coloca la serie a su favor 3-2, y se colocan a un triunfo de ganar el campeonato.
Stephen Curry (16 puntos con 7 de 22 en tiros) no tuvo su día en unos Warriors, que, sin embargo, se refugiaron en una sólida actuación colectiva con Andrew Wiggins (26 puntos y 13 rebotes) y Klay Thompson (21 puntos con 5 triples) como máximos anotadores.
En los Celtics, que ahora están obligados a vencer en el sexto partido (en Boston) y en el séptimo (de vuelta en San Francisco), el mejor fue Jayson Tatum (27 puntos y 10 rebotes).
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