Donald Trump volvió a escalar su confrontación con los grandes medios de comunicación al sugerir que las cadenas de televisión con cobertura “casi 100 % negativa” hacia su figura, el movimiento MAGA o el Partido Republicano deberían perder sus licencias de radiodifusión.
La afirmación la publicó este miércoles en su red social, Truth Social, donde el mandatario estadounidense cuestionó abiertamente si estas empresas merecen conservar un «privilegio» que, a su juicio, están utilizando con sesgo político.
El mensaje, redactado en tono provocador, concluye con una respuesta categórica del propio Trump: “¡Yo digo que SÍ!”, una frase que rápidamente generó reacciones en el ámbito político y mediático estadounidense.

Un viejo conflicto entre Trump y los medios
La relación entre Trump y la prensa tradicional ha sido tensa desde su primera campaña presidencial. Durante su mandato, calificó con frecuencia a medios como “enemigos del pueblo” y acusó a periodistas de desinformar deliberadamente. Este nuevo pronunciamiento se inscribe en esa narrativa, reforzando la idea de que parte del ecosistema mediático actúa como un actor político opositor más que como observador independiente.
Sin embargo, especialistas recuerdan que las licencias de radiodifusión en Estados Unidos no competen al presidente, sino a la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), bajo marcos legales estrictos.
Libertad de expresión y límites legales
La Primera Enmienda de la Constitución estadounidense protege de forma amplia la libertad de prensa, lo que hace altamente improbable que una medida como la sugerida por Trump pueda implementarse sin violar principios fundamentales.
Organizaciones defensoras de derechos civiles y libertad de expresión han señalado en ocasiones anteriores que cualquier intento de castigar a medios por su línea editorial abriría un precedente peligroso para la democracia.
Aun así, el planteamiento de Trump conecta con una parte de su base electoral, que percibe a los grandes medios como hostiles y desconectados de sus preocupaciones, manteniendo viva una narrativa que seguirá influyendo en la campaña política de 2026.
No hay comentarios:
Publicar un comentario