Un hombre de ascendencia dominicana se declaró culpable en New Hampshire de participar en una conspiración de lavado de dinero basada en su papel en una operación de tráfico de fentanilo que generó miles de dólares por día.
El acuerdo de declaración de culpabilidad propuesto para Sergio Martínez, de 29 años requeriría que él cumpliera una sentencia de prisión de 45 años y pierda US$2 millones en efectivo, así como la incautación de tres casas en Lawrence.
La declaración de culpabilidad de Martínez se produjo el sexto día de un juicio con jurado en un tribunal federal. El mismo está programado para ser sentenciado a principios del próximo año.
Los fiscales acusaron a un total de 34 personas de participar en la conspiración. Muchos se declararon culpables y esperan sentencia.
El testimonio en el juicio mostró que Martínez, quien dijo en una llamada telefónica grabada "lo que damos es veneno", manejó a numerosas personas, incluidos corredores, despachadores telefónicos y personas que mezclaron y empaquetaron las drogas.
Los fiscales dijeron que los investigadores confiscaron más de 12 kilogramos (26.5 libras) de fentanilo de la organización Martínez durante la investigación.
Estos dijeron que el testimonio mostró que había tres grupos de clientes. El primer grupo ordenó las cantidades más pequeñas de drogas. Los teléfonos que solían comunicarse con ellos se encontraban en una casa conocida como "la base".
Los despachadores atendían diariamente cientos de llamadas de clientes que realizaban pedidos de fentanilo y les indicaban que se reunieran con distribuidores en Lawrence y Haverhill, Massachusetts, y en ocasiones en Salem, Nueva Hampshire. Los distribuidores tenían bolsas de fentanilo de 200 gramos que cuestan 6,000 dólares cada una. Los mismos declararon que a veces tenían líneas de 10 a 15 clientes, la mayoría con placas de New Hampshire, esperándolos en la calle.
El testimonio mostró que un segundo grupo de clientes fueron atendidos por el "teléfono grande". Compraron de 10 a 200 gramos de fentanilo a la vez y lo distribuyeron ellos mismos. El tercer grupo de clientes ordenó al menos un kilogramo o más de fentanilo a la vez y llamó a Martínez directamente. Las drogas serían entregadas en taxi.
Los fiscales dijeron que los traficantes de drogas testificaron que le proporcionaron a Martínez entre US$ 30,000 y US$ 35,000 por día en función de las ventas totales de drogas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario