El sector empresarial volvió ayer, por cuarta vez, a la mesa tripartita sin tener ninguna propuesta respecto al ajuste de las tarifas de los salarios mínimos de las empresas privadas no sectorizadas y solicitó al Comité Nacional de Salarios (CNS) tiempo sin fecha para consensuar su propuesta.
Ante la solicitud de tiempo planteado por los patronos, el sector sindical, que considera una táctica dilatoria de los empresarios el pedimento de tiempo, propuso que el alza de los salarios mínimos sea aplicada de manera retroactiva a enero del 2023.
El presidente de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), Rafael -Pepe- Abreu, aseguró que esta es una táctica dilatoria de los empresarios para “barajar” lo más que pueden el necesario aumento y dijo que en otros años en que se han revisado los salarios mínimos se ha aplicado la retroactividad cuando la discusión se demora.
En este escenario, los gremios sindicales emplazaron a los representantes del Gobierno en la mesa tripartita para que asuman una postura consecuente al mandato de la ley laboral de reajustar los salarios cada dos años para devolver el poder adquisitivo de los trabajadores ante la ola inflacionaria.
Como conclusión de la reunión tripartita, el CNS decidió que en la próxima reunión el Gobierno tomará postura si los empresarios aún no tienen lista su propuesta de aumento para los salarios mínimos.
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