SANTIAGO. El ministro de Salud Pública, doctor Rafael Sánchez Cárdenas, advirtió en esta ciudad que las autoridades enviarán a la cárcel a los ciudadanos que no cumplan con el protocolo sanitario sobre uso de mascarilla y distanciamiento físico.
El funcionario dijo, en tono enérgico que cerrarán los negocios que incentiven la aglomeración de personas en lugares de recreación o bebidas.
“Están jugando a que se puede hacer de todo y sin limitaciones y el Gobierno eso no lo va a permitir por lo que, el que ande sin mascarilla será apresado y los negocios que sean sorprendidos promoviendo la aglomeración de personas para la diversión serán cerrados”, advirtió.
Las declaraciones de Sánchez Cárdenas se produjeron al hablar la mañana de ayer con periodistas locales, minutos antes de iniciar la segunda etapa de las medidas epidemiológicas iniciadas el viernes en la zona sur de aquí, donde las estadísticas muestran que es la parte de esta provincia donde más ha avanzado la covid-19 en los últimos días.
El titular de la cartera de Salud Pública participó en la jornada realizada en los barrios Hato Mayor, Nibaje, Santa Ana, Arroyo Hondo al Medio y Los Multis de Pekín, entre otros lugares, acompañado de las principales autoridades de esa institución aquí y de la gobernadora Ana María Domínguez
Sobre la proliferación de la epidemia a nivel general, Sánchez Cárdenas sostuvo que las personas que están actuando de manera irresponsable, la mayoría de ellas jóvenes “no acaban de entender el papel que juegan en la transmisión de la enfermedad”.
En otro sentido, consideró que la situación que enfrentan las autoridades es compleja, porque no pueden tomar medidas drásticas que afecten más el sector económico nacional, pero que tampoco pueden permitir que la gente circule como si no existiera en el país esa enfermedad.
“Tiene que haber un equilibrio entre la producción económica y el estado sanitario”, recalcó el ministro de Salud a los periodistas.
Sánchez Cárdenas no descartó que por lo menos en la zona sur de esta ciudad se tenga que instalar retenes policiales y militares en las áreas de acceso y salida de esos barrios, como se hizo en otros lugares del país, pero aclaró que dicha medida la determinarán las circunstancias posteriores al operativo que se realiza desde la tarde de viernes allí.
Dijo que trabajan en la localización de los positivos y sintomáticos de esa área, para luego tomar la decisión en función de la situación que se detecte, a través de pruebas rápidas y de PCR.
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