Los cadáveres de la madre, la abuela y la nieta dominicanas que murieron en un aparatoso accidente el domingo a las 6:30 de la mañana, cuando estaban a punto de llegar a las cataratas del Niágara, cerca de Búfalo, serán llevados a Nueva Jersey
el viernes, mientras los familiares están pidiendo que los seis niños heridos, dos de ellos graves, que están en un hospital del pueblo Sheldon en el condado Wyoming, sean trasladados a hospitales de ese estado.
Las muertas fueron identificadas como Ondina Castro de la Cruz, de 47 años (abuela), Mayelín Brito Castro, de 32 años (hija), y una menor de 4 años, Kiara Hernández (nieta) y los heridos son Reyes Rodríguez, de 55 años, padre y abuelo de los niños lesionados, María Brito Castro, de 26 años, un adolescente de 14, una niña de 10 y dos niños gemelos de 4.
El chofer de la camioneta que impactó a los dominicanos es Richard Sawicki, de 20 años de edad, residente de Lackawanna, Nueva Jersey.
Fue arrestado por homicidio vehicular agravado, conducir en estado de ebriedad e imprudencia temeraria.
Está preso en la cárcel del condado de Wyoming con una fianza de $100,000 en efectivo o $200,000 en bonos, y su licencia fue suspendida.
Tendrá que regresar a la corte el 10 de junio de 2019. La policía dijo que es posible que se le sumen más cargos.
La niña muerta y los otros menores heridos, no llevaban cinturones de seguridad y en la camioneta en la que viajaban, no había asientos para ellos.
El abuelo, que sufrió la rotura de tres costillas está estable y habló anoche a medios locales, diciendo que no puede creer que su esposa, la hija y la nieta murieran en el accidente.
Dijo que solo quiere que los niños que están el hospital del condado Wyoming, reciban el tratamiento médico adecuado para que les salven las vidas.
“Él venía como a 160 millas por hora, por lo menos... y cuidado si más, pensamos que se iba a parar”, dijo el señor Reyes.
“El vehículo que el golpeó, era fuerte y duro”, añadió en referencia a la guagua tipo Kia Sedona de siete pasajeros.
Los fallecidos eran nativos del barrio Capotillo en Santo Domingo y habían emigrado a Estados Unidos en 1989, residiendo en Perth Amboy (Nueva Jersey).
Reyes, narró que pidió a su hija que iba conduciendo el vehículo impactado, que viajaran en la noche porque había menos tráfico en las carreteras.
El conductor es acusado de varios cargos criminales, entre estos, asesinato vehicular, manejar borracho y conducta imprudente temeraria.
Está preso con fianza de entre $100.000 en efectivo y $200.000 con bonos.
La policía estatal de carreteras dijo que los niños no estaban en asientos para menores ni llevaban puestos cinturones de seguridad.
El impacto fue tan fuerte que las mujeres y la niña fueron expulsadas hacia fuera, cayendo en el pavimento, donde la madre y la abuela, fueron declaradas muertas.
La menor fue transportada por paramédicos al hospital Wyoming County Community Hospital (WCCH) con graves lesiones en la cabeza, y murió una hora después de ser ingresada.
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