SANTIAGO. Fueron liberadas ayer tres exempleadas del hospital José María Cabral y Báez acusadas y sometidas en 2017 por sustracción de medicamentos valorados en cerca de dos millones de pesos.
Las beneficiadas con la disposición del Primer Tribunal Colegiado de este distrito judicial son Solángel Celeste Taveras García, Francisca Isabel Ramírez y Jenifer Carolina Toribio.
Las dos primeras se desempeñaban como encargadas de farmacia y de almacén, respectivamente, mientras que Toribio trabajaba como enfermera del hospital.
A principios de diciembre de ese año el juez del Tribunal de Atención Permanente de la provincia de Santiago, Luis Ernesto Torres Paulino, impuso tres meses de prisión preventiva, como medida de coerción, a Toribio le impuso presentación periódica ante la Fiscalía.
El tribunal que preside la magistrada Ingri Liberato, decidió ayer descargar a las imputadas porque según sus abogados Francisco Hernández y Ángel Luciano, el sometimiento de ellas se produjo en base a pruebas ilegales presentadas por el Ministerio Público y las autoridades del hospital Cabral y Báez.
Aseguraron que el tribunal tomó en cuenta las pruebas presentadas por ellos con relación a las evidencias mostradas por la parte acusadora, las que no habrían sido obtenidas conforme a los principios de la legalidad que establece el Código Precesal Penal.
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