Mas de 20 familias que perdieron sus casas debido a una crecida del río Moca en el barrio Los López III de ese municipio, se lanzaron a las calles este jueves en reclamo de que las autoridades vayan en su auxilio.
A más de un mes de que ocurrió la riada, los afectados no tienen donde dormir, por lo que con toques de cacerolas vacías pidieron a las autoridades de Espaillat prestarle la atención requerida.
Dijeron que a pesar de no tener un techo donde alojarse tampoco reciben ningún tipo de ayuda por parte de las instituciones gubernamentales.
“Nosotros llevamos más de 35 días en esta situación y todavía no hemos recibido nada de parte de las autoridades”, denuncio uno de los manifestantes.
El desborde del rio Moca destruyó un total de 18 casas y cuatro quedaron a punto de colapsar.
Aunque los manifestantes tenían previsto realizar una protesta frente a la gobernación de Espaillat, por las condiciones del tiempo fue reprogramada por los organizadores
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