NUEVA YORK – En los últimos días, los usuarios de Uber en Nueva York notaron una extraña opción en la barra inferior de sus aplicaciones. Donde aparecen las opciones de tipos de automóviles, ahora había un “modo De Blasio” y, al seleccionarlo, entregaba un mensaje que daba 25 minutos de espera y decía que ésto es lo que se lograría si se aprueba la medida del alcalde.
Esto es parte de la agresiva campaña de la empresa para criticar un proyecto de leyque limitaría la cantidad de vehículos de este tipo de
aplicaciones en la ciudad. Además, Uber ha estado publicando una serie de comerciales y avisos en televisión y diarios y, hace pocos días, la empresa realizó un evento de prensa donde líderes afroamericanos criticaron el proyecto.
De acuerdo con el New York Post, el miércoles se reunirán los demócratas del Concejo Municipal para discutir su voto, el que sería llevado a cabo el jueves. La medida fue propuesta por el concejal Stephen Levin, y obligaría a Uber a limitar la cantidad de licencias de taxis que distribuye, permitiéndoles añadir sólo 200 choferes el próximo año. Además de Levin, otros seis concejales auspiciaron la propuesta: Karen Koslowitz, Paul Vallone, Rory Lancman, Costa Constantinides y Andy King. De acuerdo con Crain's New York, los votantes de los distritos de estos funcionarios, excepto King, han recibido intensos correos por parte de Uber, criticando el proyecto. King, quien representa a El Bronx, es el único afroamericano del grupo, y dijo que está pensando en retirar su apoyo a la moción.
“Necesito conseguir más información”, indicó King a Crains New York, quien agregó que no se ha reunido con la empresa y que debe considerar si Uber entrega estabilidad financiera a comunidades de bajos ingresos.
Mientras tanto, en Uber siguieron disparando contra la alcaldía. “El plan del alcalde De Blasio para detener a Uber costará 10,000 empleos, va a herir las áreas con menos servicios y hará que los tiempos de espera de autos de Uber se disparen”, anticipó elvocero de la empresa David Plouffe en un comunicado. “Bajo esta visión, los pasajeros de Nueva York pueden ver ellos mismos cuánto tiempo les costará este pago político a los grandes dueños de taxi”.
A su vez, en la alcaldía se mantienen firmes en su posición. “Las tácticas de ninguna compañía les dan derecho a deshacerse de reglas hechas para proteger al público”, planteó el vocero de De Blasio, Wiley Norvell. “Tenemos la labor de mantener a esta ciudad segura, seguir trabajando y velar por el interés público”.
Mientras tanto, otros políticos han sugerido nuevos ángulos. “En vez de crear moratorias generales que limiten el crecimiento y la innovación, deberíamos priorizar regulaciones inteligentes”, recomendó el concejal Ben Kallos. “El año pasado, se introdujeron leyes para regular Uber y proteger consumidores de la excesiva alza de precios en tráfico, apoyando a los conductores livery y promoviendo la competencia abriendo el sistema electrónico a todos los medallones”.
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