NUEVA YORK._ La millonaria heredera de la famosa marca de ropas interiores para mujeres, Candice Fienbergh, está demandando a su esposo Steven Lalicata por supuestamente haberle robado $744.000 dólares para gastarlo en una amante dominicana identificada como Diana Fernández.
Ella alega en la corte que su marido la presionó para que le entregara la alta
suma, diciéndole que lo usaría para pagar sus deudas de juego, pero en cambio, lo gastó en lujos para satisfacer la voracidad de la amante dominicana.
La demandante, que se casó en 2011 con Lalicata, dijo que sacó el dinero de su fondo fiduciario y que estaba siendo amenazado por matones del crimen organizado que le exigían pagar las deudas.
El hombre, también le aseguró que ambos, serían perjudicados por elementos de la mafia, con la que la convenció.
Feinberg, quien asegura que confiaba en su marido, y pensó que él estaba diciendo la verdad porque a menudo salía de la casa a altas horas de la noche, por lo que ella supuso que estaba jugando.
La reclamante argumenta que su esposo incluso, fue tan lejos que también convenció a sus primos a mentir por él y grabó las conversaciones con ellos.
La hija de Herbert Feinberg, cuya marca se especializa en fabricar pantis sin costuras, relató que comenzó a sospechar de la infidelidad de su marido por lo que ella contrató un detective privado para seguirlo.
El investigador descubrió que Lalicata estaba teniendo un romance con Diana Fernández y el dinero que su mujer le había dado para pagar sus supuestas deudas de juego, en realidad había sido utilizado para comprarle lujos a su amante.
Feinberg presentó entonces una demanda de $ 10 millones en contra de su marido en la corte de Nueva York en la que incluye a Fernández como la amante de su esposo.
Oscar Holt, el abogado de Fernández, niega que la dominicana era la concubina del hombre y afirmó que “ellos, eran sólo buenos amigos”.
La pareja que está separada a causa del dinero, se casó en 2011 después de conocerse en un salón de bronceado de playa en Manhattan, donde Lalicata estaba trabajando en ese momento.
La demanda fue presentada en 2012, pero es ahora cuando trascendió a los medios.NUEVA YORK._ La millonaria heredera de la famosa marca de ropas interiores para mujeres, Candice Fienbergh, está demandando a su esposo Steven Lalicata por supuestamente haberle robado $744.000 dólares para gastarlo en una amante dominicana identificada como Diana Fernández.
Ella alega en la corte que su marido la presionó para que le entregara la alta suma, diciéndole que lo usaría para pagar sus deudas de juego, pero en cambio, lo gastó en lujos para satisfacer la voracidad de la amante dominicana.
La demandante, que se casó en 2011 con Lalicata, dijo que sacó el dinero de su fondo fiduciario y que estaba siendo amenazado por matones del crimen organizado que le exigían pagar las deudas.
El hombre, también le aseguró que ambos, serían perjudicados por elementos de la mafia, con la que la convenció.
Feinberg, quien asegura que confiaba en su marido, y pensó que él estaba diciendo la verdad porque a menudo salía de la casa a altas horas de la noche, por lo que ella supuso que estaba jugando.
La reclamante argumenta que su esposo incluso, fue tan lejos que también convenció a sus primos a mentir por él y grabó las conversaciones con ellos.
La hija de Herbert Feinberg, cuya marca se especializa en fabricar pantis sin costuras, relató que comenzó a sospechar de la infidelidad de su marido por lo que ella contrató un detective privado para seguirlo.
El investigador descubrió que Lalicata estaba teniendo un romance con Diana Fernández y el dinero que su mujer le había dado para pagar sus supuestas deudas de juego, en realidad había sido utilizado para comprarle lujos a su amante.
Feinberg presentó entonces una demanda de $ 10 millones en contra de su marido en la corte de Nueva York en la que incluye a Fernández como la amante de su esposo.
Oscar Holt, el abogado de Fernández, niega que la dominicana era la concubina del hombre y afirmó que “ellos, eran sólo buenos amigos”.
La pareja que está separada a causa del dinero, se casó en 2011 después de conocerse en un salón de bronceado de playa en Manhattan, donde Lalicata estaba trabajando en ese momento.
La demanda fue presentada en 2012, pero es ahora cuando trascendió a los medios.
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